lunes, 15 de noviembre de 2010

Somos especiales.

   El murciano es un tipo, iba a decir singular, aunque realmente a ser sinceros mas bien creo que somos complicados, tanto que yo que soy también de esta hermosa tierra del pimentón, si me dicen que somos una especie...me lo creo. Y si me aseguran que somos el eslabón perdido o uno avanzado, pues también; pero a nosotros, no me digas por qué, nos pasa algo.
   Lo que no entiendo de Murcia es como no ha surgido un campeón del mundo de ajedrez, y no lo entiendo porque para cuando tú dices una cosa, el murciano ya ha pensado unas 4.000. Tu,  por ejemplo en Badajoz o en Lerida, pones un vaso encima de la mesa, y eso, lo pones. Aquí no. Aquí pones un vaso encima de la mesa y el primer pensamiento del murciano es porqué lo pusiste justo en ese lado y no en el otro, y porqué más a la izquierda que a la derecha o más adelante que atrás. No hay forma, para el murciano cualquier lugar vale menos justo donde lo colocaste porque piensa: " Por algo lo pone ahí", cuando la respuesta es "¿Qué por qué ahí?, porque es la mesa; digo yo,  ¿Si? pues no. Pero no creas que el murciano lo hace porque piense mal de ti o, por lo que se suele decir, desconfié, sino por que somos así y no lo podemos evitar. Y es que así como un vasco disfruta viendo cortar un tronco de un hachazo, o un catalán al ver subir el Ibex 35 hasta un 8.000 sin oxigeno, pues nosotros somos felices dándole vueltas y más vueltas a las cosas, a lo que sea, qué le vamos a hacer....Murcia que hermosa eres.