jueves, 14 de junio de 2012

    Hace casi dos meses que le di a la tecla de pause de este blog y hoy me permito alejar el dedo por un momento mientras me lo pongo en la perilla intentando adivinar qué contar y qué callar. En este tiempo sin ser muy largo, han pasado muchas cosas y se me atropella todo en la cabeza. Como resumen diré que no ha ido demasiado bien, sino todo lo contrario..., pero no voy a compadecerme de mi mismo, ni ser negativo, ni siquiera dar detalles. Los detalles me los grapo a las sienes para que no se me olviden nunca.
    Y claro, al pensar una vez mas, la decepción me envuelve con papel transparente por todo el cuerpo y me mete de una pieza en el congelador de casa, junto al arroz tres delicias...Oigo como los guisantes cuchichean entre ellos de mí y le dan codazos a los granos de arroz mientras intentan disimular. Los escucho perfectamente, son unas palabras que dejaría colgadas en el tendedero de tus pestañas al árido Sol de tu mirada.   
     Este blog me pincha mientras lo escribo, me trae demasiados recuerdos que estaban en el fondo de un saco con agujeros, recuerdos que ni quiero, ni puedo sacar de mí aunque me estén causando el malestar típico de una comida que a sentado mal.
     Agradeceré vuestras palmaditas en la espalda y vuestros abrazos virtuales. ¿¿¿Que es eso de la penicilina???.
    Me doy cuenta, que de un tiempo a esta parte, mis arcadas me salen hasta por la nariz convirtiéndose en algo muy desagradable para mí, por eso ahora tomo Biodramina.
   Por eso callo.

                                Por eso mismo.